Atendiendo la solicitud presentada ante la Facultad de Arquitectura, por parte de la estudiante de Lenguas Extranjeras Paola Mosquera, quien debido a su discapacidad motriz manifestaba sus dificultades cotidianas para acceder a la Sede Regional Sur, Suan de la Universidad del Atlántico -por lo agreste del terreno y tener que atravesar en silla de ruedas el cauce de un arroyo-; se aprobó la construcción de una rampa de acceso, que permitiera y facilitara la circulación de toda persona que presentase este tipo de condiciones.

El proyecto se enmarca en la intervención de accesibilidad y diseño paisajístico, articulado al sistema urbano del municipio de Suan-Atlántico; aplicando conceptos de diseño inclusivo, que eliminen las barreras arquitectónicas para la comunidad, haciendo énfasis en la discapacidad motriz.

En la propuesta de diseño arquitectónico, que consiste en una intervención para la accesibilidad inclusiva “puente-rampa” y diseño paisajístico, participan la Coordinación de la Sede Regional Sur y la Facultad de Arquitectura en sus Programas T y T, que allí se dictan.

El proyecto está avalado por la decana de la Facultad de Arquitectura, Marcela Cuellar Sánchez; los coordinadores de los programas T y T de Arquitectura, Carlos Rada Solano y Cristian Castro Escalante; y el encargado del mismo, el docente César Martínez García. Un proyecto en el que además participan los estudiantes que cursan los niveles más avanzados de los Programas T y T de Arquitectura, contando además con el apoyo logístico de la Vicerrectoría de Bienestar Universitario y el Departamento de Regionalización de Uniatlántico.

Con el fin de conseguir fondos para ejecutar la obra, se convocó a una ‘Rampatón’ a estudiantes y docentes de la sede regional sur, Suan. Y a través de la realización de diferentes actividades, se logró en primera instancia, conseguir los fondos iniciales para adelantar esta tarea de inclusión social.

El objetivo es que la rampa pueda estar terminada antes que llegue el periodo invernal, que aumenta la dificultad de acceso a personas como Paola Mosquera, quien tuvo la iniciativa de poner en marcha, toda esta corriente de solidaridad a nivel institucional.