Historia

El Programa tiene su origen en la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad del Atlántico; que desde 1964, contribuyó, no solo con la formación profesional de los bachilleres de la Región Caribe colombiana, sino, también con los Bachilleres  del ámbito  Nacional.

El Programa fue creado por el acuerdo 001 de enero 10 de 1964, el cual crea la Facultad de Ciencias de la Educación y en su artículo 2 numeral c, la Facultad tendrá la Especialidad de Ciencias Biológicas y Químicas.

Este Programa empieza sus labores en agosto de 1969, con la de nominación de Ciencias Biológicas y Químicas.

El Programa recibe del Ministerio de Educación Nacional mediante la Resolución 9479 de 25 de noviembre de 1974 la aprobación de la Licenciatura en Educación con Especialización en Biología y Química, el cual tenía aprobación del plan de estudios mediante el Acuerdo Número 14 de noviembre 5 de 1973 del Consejo Directivo de la Universidad.

La anterior aprobación del Ministerio de Educación Nacional, fue otorgada luego de la recomendación emanada del ICFES, enseguida del proceso de evaluación, mediante Acuerdo número 159 de octubre 2 de 1974 en sus artículos 1ro y 2do, donde recomienda al Ministerio de Educación Nacional la aprobación del Programa de Licenciatura en Educación con Especialidad en Biología y Química de la Universidad del Atlántico, y a su vez, solicita al Ministerio que le autorice a la Universidad del Atlántico para otorgar el título de Licenciado en Educación con Especialidad en Biología y Química.

A lo largo del tiempo y basado en los procesos de autoevaluación y revisión continua del currículo, previamente autorizado por las instancias competentes, el Programa tomó la denominación de Licenciatura en Biología y Química.

Luego la denominación del Programa cambia nuevamente a Licenciatura en Educación Básica con Énfasis en Ciencias Naturales y Educación Ambiental, el cual surge a partir del Decreto 272 de 1998, como respuesta a las últimas políticas emanadas por el M.E.N., previo cumplimiento de los requisitos de Ley exigidos por éste. Dándole la denominación al Programa en mención, según Acuerdo Académico 1526 de junio 8 del 2000 de la Universidad del Atlántico y refrendado por el I.C.F.E.S., según el código 120245000000800111100, obteniéndose la Acreditación Previa.  Actualmente con su respectivo Registro Calificado, asimilado por el Decreto 2566 del 2003.

El Programa retoma su denominación de Licenciatura en Biología y Química en el 2011 mediante la Resolución Académica 00029 de agosto 3 de 2011, y el 1 de junio de 2011, adquiere su registro calificado bajo Resolución del M.E.N./ 4403 por una duración de siete (7) años. El 10 de junio de 2015 el MEN otorgó la Acreditación en Alta Calidad al programa bajo resolución 8388 de la misma fecha.

MISIÓN DEL PROGRAMA.

“Somos un Programa que forma profesionales integrales con actitud investigativa, que articula de manera interdisciplinaria el Saber Pedagógico con las Ciencias Naturales contribuyendo con el desarrollo de la Región Caribe y el País”.
 

VISIÓN DEL PROGRAMA.

“El Programa de Licenciatura en Ciencias Naturales, se visiona como líder con proyección en las áreas de conocimiento en: Pedagogía, Biología, Química y Medio Ambiente, con amplio reconocimiento en su zona de influencia”.

Competencias

El programa forma profesionales que asumen la investigación articulada a la práctica pedagógica, para estimular su participación en los procesos de reflexión teórica, en un contexto que mediado por la tecnología propicia el surgimiento de otros recursos educativos, necesario en la gestión, pero también en la enseñanza y el aprendizaje de saberes y conocimientos, favoreciendo la aprehensión de habilidades y competencias asociadas a una visión crítica, reflexiva y argumentativa de la realidad educativa y ambiental para propiciar y liderar procesos de transformación social. Así mismo, fortalece en el estudiante, competencias pedagógicas, investigativas, tecnológicas, sistémicas, de innovación, comunicativas y ciudadanas.

El reto del programa es formar maestros competentes en el saber, saber hacer, el ser y el saber convivir, por lo tanto, no solo hay que asociarlo a la existencia de fundamentos teóricos y pedagógicos, sino a la capacidad de asumir situaciones nuevas, de actuar con comprensión, “tacto”, responsabilidad y eficacia en distintos contextos, capaces de apropiar otros saberes, compromiso activo que desde su cotidianidad aproxime la compresión de una realidad contextual mediada desde el conocimiento científico.

Se relacionan así los siguientes pilares fundamentales de la educación.

• Aprender a Ser: actúa con creciente capacidad de autonomía, juicio y responsabilidad personal.
• Aprender a con-Vivir: desarrolla la comprensión del otro mediante proyectos comunes, respetando los valores del pluralismo, el entendimiento mutuo y la paz.
• Aprender a Conocer: Comprende los conocimientos de la cultura y caracteriza problemas e interrogantes pertinentes.
• Aprender a Hacer: Interviene consensualmente los problemas y propicia las condiciones para transformar entornos laborales.

El Perfil de formación está en concordancia con el desarrollo de las Competencias Generales, que posicionan al estudiante desde el punto de vista integral, mediante los siguientes tópicos:

• Desarrolla compromisos con la Enseñanza de las Ciencias Naturales y la elaboración de Proyectos Ambientales acordes con el Proyecto de Nación, consecuente con los avances científicos y los aspectos tecnológicos.
• Desarrolla actitudes investigativas comprometidas con su quehacer pedagógico.
• Aplica en el proceso pedagógico, la fundamentación didáctica propia de las Ciencias Naturales.
• Aplica principios morales y cívicos en su quehacer profesional en los distintos sectores en los que intervenga.
•  Participa en equipos de investigación que propendan por la actualización de los conocimientos y por la implementación de propuestas de mejoramiento en el campo de las Ciencias Naturales, proyectándose a la vez, hacia el intercambio con otras comunidades de investigadores a nivel nacional e internacional.
• Despierta el interés, la solidaridad y el altruismo en el marco de sus prácticas pedagógicas e investigativas, desde la perspectiva de su saber de énfasis.
• Desarrolla competencias auto investigativas generadoras de pensamiento crítico- vivencial – pedagógico y educativo, sobre su quehacer docente y la vida del centro educativo, con miras a su transformación cualitativa.
• Reconstruye teóricamente los actos pedagógicos, en sus propiedades y cualidades, para valorarlos, poderlos transformar y de esa manera, contribuir a la construcción de un modelo pedagógico desde una perspectiva critico social.
• Desarrolla actividades de auto-evaluación institucional, que posibilite develar el modelo educativo que determina su calidad histórica y construir otro pertinente con el Estado.
• Elabora y sustenta proyectos académicos, que contribuyan a la transformación de la actividad académica, acorde con el nuevo tipo de estudiante investigador que demanda nuestro País, a partir de los proyectos pedagógicos.
• Organiza y argumenta científicamente, desde el campo de la Pedagogía, una propuesta (P.E.I.) de transformación de la actividad educativa, en concordancia con las exigencias del contexto desde la mirada del proyecto de nación/región consagrado en la Constitución Nacional.
• Crea y argumenta científicamente y desde lo cotidiano los proyectos ambientales escolares como actividades sociales del programa.

El perfil de formación, es concordante con las competencias generales, el reto del programa es formar maestros competentes en el Saber, Saber Hacer, el Ser y el Saber Convivir. Por lo tanto, formar en unas competencias, no solo hay que asociarlas a la existencia de ciertos fundamentos, sino a la capacidad de asumir situaciones nuevas y de actuar con comprensión, “tacto”, responsabilidad y eficacia en distintos contextos, que sean capaces de apropiar nuevos conocimientos, gracias a un compromiso activo, desde, su cotidianidad aproximando este contexto al conocimiento científico y adaptarse a situaciones relativamente impredecibles.

Las competencias las relacionamos de la siguiente forma:

• Enfrenta la vida en forma crítica, creativa y reflexiva, amante del cambio y capaz de transformar el medio o comunidad donde se desenvuelve.
• Dirige instituciones educativas e incursiona en la solución de problemas educativos y pedagógicos de la Región y el País.
• Fomenta la integralidad de las disciplinas que conforman esta área, como unidad del saber en la enseñanza de las Ciencias Naturales y Educación Ambiental, específicamente las disciplinas de Biología y Química.
• Desarrolla una visión diferente del papel de su profesión en la sociedad, que le permita contribuir a la formación integral del educando y al desarrollo de su talento en pro de su beneficio y el entorno.
• Promueve el desarrollo Humano Integral Armónico mediante la relación de los saberes científicos – pedagógicos en la orientación y formación de los futuros docentes de nuestra Región y del País.
• Desarrolla conocimientos epistemológicos que le posibiliten construir una visión del mundo y una cultura científica.
• Desarrolla actitudes y competencias investigativas que generen nuevas visiones alternativas en la consecución de valores y principios democráticos y el respeto por la naturaleza y la sociedad.
•  Impulsa la educación ambiental, como alternativa que desarrolla en los docentes actitudes para liderar proyectos comunitarios, sobre las causas y efectos de los problemas ambientales y sus posibles soluciones.

Las competencias específicas que desarrolla el futuro Licenciado en Ciencias Naturales, como persona y miembro de una sociedad son:

• Actor de una institución educativa y propone el desarrollo de la autonomía como máximo logro del proceso educativo.
• Desarrolla actividades encaminadas a satisfacer sus necesidades espirituales y materiales como un todo único.
• Tiene personalidad, pero privilegia el desarrollo armónico de las dimensiones de la persona, orientadas al logro de las competencias.
• Propicia aprendizajes significativos sobre saberes disciplinares, profesionales y de contexto.
• Atiende la formación de valores éticos.
• Destaca la conversación abierta y creativa como estrategia para la formación.
• Incorpora Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en los procesos de enseñanza, de aprendizaje y de construcción del conocimiento.
• Reconoce diversas clases de conocimiento, formas de alcanzarlo y métodos para propiciarlo.
• Diseña un currículo alternativo por competencias, caracterizado por la integración del conocimiento en núcleos, el trabajo en equipos docentes, la investigación y la práctica como sus soportes.
• Actúa en concordancia con el momento histórico, con una expresividad de su identidad, Saber ¿quién es? ¿De dónde viene?, y ¿Para dónde va?
• Ayuda a los estudiantes a construir colectiva y conscientemente significados con responsabilidad intelectual y ética, conducente a formar el ciudadano que el nuevo País demanda.